La constancia

A veces nos cuesta creer, a veces la escritura se complica, a veces no sabemos porqué lo hacemos, pero también es verdad que si persistimos en ello, si insistimos, siempre de algún modo somos recompensados, algo ocurre y es entonces cuando nos damos cuenta de que cada granito de arena, cada palabra escrita,  ha servido para formar una gran marea de palabras y ellas, ellas son nuestra victoria.

Anoche tuve un sueño

Cuando tienes un sueño bonito es importante no olvidarlo, me desperté por la mañana contenta, había pasado ese momento en el que aún no sabía si realmente había sucedido de verdad o estaba soñando, cerré los ojos para no no dejar que el sueño me abandonara y durante un rato pasee de la mano con él, supe que era una señal, que una sueña lo que desea y que también  desea lo que sueña, en cualquier caso, me levanté y como no sabía si estaba despierta de todo, comencé a vivir lo que había soñado.

Escuchar a Vargas LLosa

Como siempre, escuchar a Vargas LLosa es un placer, entre algunas de las verdades que dijo ayer en la entrevista, me quedo con la de que la mejor recompensa del escritor, es precisamente el momento de la escritura, ese rato en el que uno se aparta del mundo y entra en ese otro espacio tan particular, tan lleno de misterios que nos arrastra a seguir.... como si nuestra escritura fuese, en realidad, lo más importante del mundo, lo que nos agarra a él.